jueves, 16 de mayo de 2024

Chopin: "Berceuse" - canción de cuna


No cabe duda de que es muy difìcil imaginarse a Chopin comprometido en arrumacos con un bebé. Pero pudo haber sucedido, en Nohant, uno de los veranos que allí pasó en compañía de la Sand y sus hijos. El verano de 1844, por ejemplo, cuando, como de costumbre, la casa de verano de la prolífica escritora se abarrotó de artistas, entre poetas, pintores y músicos. Como siempre, se reanudaron los paseos y excursiones por la región, además de las veladas, luego de una jornada de gratificante trabajo, para Chopin y la Sand, y de enriquecedora contemplación, para poetas y artistas.

Ese verano, además, llegó de visita Ludwika Chopin, la hermana mayor de Frédérik, a quien éste no veía desde su partida de Varsovia, hacía 14 años. Pero hubo alguien que no pudo asistir. La cantante, pianista y compositora Pauline Viardot-García, se encontraba de gira. En su representación, dejó con ellos a su pequeña hija de tres años, al cuidado de la Sand. La bebé se convirtió en el querubín de todos, y más de un estudioso de la época especula que la pequeñuela haya podido ser la inspiración de la Berceuse en Re bemol, la canción de cuna comenzada por Chopin ese año en Nohant.

La obra, terminada en París, fue publicada al año siguiente con dedicatoria a una persona muy querida por Chopin, su pupila y admiradora Elise Gavard, quien se constituirá en un gran apoyo luego de su ruptura con George Sand, solo tres años después, en 1847, y quien estará presente ante su lecho de muerte, dos años más tarde.

Berceuse opus 57 en Re bemol mayor
La breve y sencilla pieza es la única canción de cuna que compuso Chopin. Pero ella le bastó para elevar la forma a una categoría superior de arte, de la que tomaron inspiración otros compositores, Liszt entre ellos. La obra toma la forma de tema y variaciones, con una línea melódica apoyada en la armonía más simple que pueda imaginarse: tónica y dominante, un basso obstinato que recorre toda la pieza, de principio a fin, encargado a la mano izquierda. Las variaciones son 14, con una dificultad que va en aumento hasta la parte central de la pieza para luego volver a la sencillez del principio.

La versión es del excelente pianista australiano Jayson Gillham, durante su participación en Segunda Etapa en el décimosexto Concurso Internacional Chopin, en Varsovia, el año 2010.

2 comentarios :

  1. Gracias por hacernos comprender. Hermosa Música. Inmensa labor.

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