miércoles, 24 de octubre de 2012

Donizetti: "Una furtiva lágrima"



El estilo vocal conocido como bel canto nació en el siglo XVII, floreció durante el XVIII y va a alcanzar su máximo esplendor y desarrollo en el primer tercio del siglo XIX, con las obras de los maestros italianos Gioacchino Rossini (n. 1792), Gaetano Donizetti (n. 1797) y Vincenzo Bellini (n. 1801), quienes lograron conjugar la pureza de la voz y el virtuosismo técnico propios del bel canto barroco con una nueva elocuencia que el temprano romanticismo comenzaba a alentar: la expresión y manifestación de las emociones humanas.

Gaetano Donizetti (1797 - 1848)
Rossini, el mayorcito, sorprendió a medio mundo cuando decidió abandonar los escenarios para siempre, luego de componer su última ópera en 1829, pero dejó así el camino abierto a sus colegas para que éstos cimentaran un estilo propio.
Sobre todo para  Donizetti, pues cuando su jovencísimo camarada Vincenzo Bellini abandonó este mundo, Gaetano se encontraba en la etapa de su vida en que su fama y reputación se hallaban en la cúspide.
Para 1835, año de la muerte de Bellini, Gaetano Donizetti había compuesto cuatro de sus más grandes obras, si no parejamente saludadas por la crítica, al menos popularmente exitosas: Anna Bolena, El elixir de amor, Lucia di Lammermoor y Lucrezia Borgia, y le quedaba por componer La fille du régiment, otro gran éxito, de público y crítica.

El elixir de amor, ópera cómica en dos actos estrenada en Milán en 1832, es una de las obras de Donizetti que en nuestros días se interpreta con mayor frecuencia. Su aria más célebre es la romanza para tenor, Una furtiva lágrima, correspondiente al segundo acto. Tal es su resonancia hoy que Woody Allen no dudó en incluirla en la banda sonora de su película "Match Point", de 2005, lo que llevó a otro director a hacer lo mismo en un film más reciente, "Los amantes".

Nemorino, ingenuo campesino enamorado de una muchacha rica y adinerada, ha caído en el engaño de un charlatán que viaja pueblo tras pueblo vendiendo una pócima mágica para conquistar el corazón de la amada, que no es más que una buena cuota de vino de Burdeos –"el elixir de amor". Nemorino ha tomado un buen trago sólo para comprobar que no ha surtido ningún efecto en su enamorada. Pese a todo, le ha parecido que su amada soltó una lágrima cuando lo vio alejarse, desencantado. Señal de que lo aman, piensa. Y por eso canta.

La versión, la mejor disponible, por lejos... Pavarotti, saludado por un minuto y medio de aplausos.



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11 comentarios :

  1. Una voz inconfundible, con una fuerza vívida de principio a fin, tan nítida ... que no puede dejar de sentirse la impresión de un sentido y perdurable silencio en las obras por él interpretadas.

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    1. Muy acertado, Anónimo. Luciano parece cantar cada nota sin esfuerzo alguno con una nitidez asombrosa. Aunque no todos lo perciben así, y francamente, no logro entenderlos.

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    2. Como lo expresa en el blog ..."hay que dejarse invadir por ella"... cerrar los ojos, abrir los óídos del alma y dejar que cante por sí misma.

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  2. Hi, Nice post thanks for sharing. Would you please consider adding a link to my website on your page. Please email me back.

    Thanks!

    Madison
    maddie0147@gmail.com

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  3. Media gracia si el es cantante.

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  4. Dagui, las categorías de arriba no son excluyentes, así que las marqué todas. Qué maravilla!! Cómo no enamorarse de un campesino que le cante a una sí... uffff.

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    1. Ahora entiendo. Creí que el campesino tenía que cumplir una condición...
      Gracias por comentar, Anónima.

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  5. http://www.youtube.com/watch?v=xPdD_nQ7Ylc
    You’d realize a kind of different colors from her voice with the Donizetti's Una Furtiva Lagrima.
    Try to listen.

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  6. Thank you, Anónimo. I'll try it.

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