jueves, 31 de octubre de 2019

Sarasate: "Zapateado", para violín y piano



Pablo Martín Melton Sarasate y Navascuez, más conocido como Pablo de Sarasate, hizo su debut público a los ocho años, y a los doce ingresó al Conservatorio de París gracias a una beca otorgada por la reina Isabel II de España luego de deslumbrar a la corte en Madrid con su talento. Cinco años después, se hacía merecedor del primer premio de violín, en el Conservatorio.

El violinista
Nacido en 1844 en Pamplona, la ciudad célebre por los encierros de toros en la fiesta de San Fermín, hoy de capa caída debido a los legítimos reclamos "animalistas", iniciará desde París una extensa e interminable gira que durará casi tres décadas, recorriendo Europa y Estados Unidos, cosechando éxitos y reconocimiento de los autores en boga que le dedicarán sus obras y accederán gustosos a la solicitud de obras para su instrumento, el violín.

Pablo de Sarasate (1844 - 1908)
El compositor
Pablo de Sarasate es autor de alrededor de 50 piezas para violín y piano (o violín y orquesta), que formaron parte de su solicitado repertorio. Entre las más populares sobresalen Aires gitanos (Zigeunerweisen), de 1878 y la Fantasía sobre Carmen, la ópera de Bizet, compuesta en 1883 cuando la ópera ya se había ganado el favor del público luego de su fallido estreno en 1875, que dejó al infortunado Georges convencido de haber compuesto una obra malograda, tres meses antes de su muerte.

Sarasate pasó los últimos años de su vida en una villa en Biarritz, Francia. Pero no olvidó sus orígenes. Todos los años, hasta su muerte, viajó a Pamplona, a celebrar con su violín las fiestas de San Fermín.

Las Danzas Españolas
Entre 1878 y 1882, Sarasate compuso cuatro volúmenes de breves danzas españolas, para violín y piano o violín y orquesta (Opus 21 al 23, y 26), que se ganaron prontamente el favor del público, generando ingresos económicos no despreciables para el autor y demás involucrados en su performance.

La más célebre de ellas es Zapateado, que lleva el No 2 del Opus 23. La danza no solo deriva su ritmo y gestualidad directamente de la música popular española, sino que también representa una suerte de catálogo de los efectismos "violinísticos", muy populares entre los virtuosos del instrumento de finales del siglo XIX.

La versión es de la artista norteamericana de origen japonés, Midori Goto. Al piano, Robert McDonald.

12 comentarios :

  1. Bonito blog y asequible, me comprometo a comentar y que poco a poco intercambiamos opiniones, violin para virtuosos hermosas composiciones de nuestro compositor.

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    1. Hola, Juan: Con el mayor de los gustos, pues. Saludos y muchas gracias por dejar tu comentario aquí.

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  2. Recién descubro este blog. Es maravilloso!
    Gracias, Dago, por tomarte el trabajo de compartir y reseñar tanta música.
    Te saluda desde Uruguay uno de tus nuevos lectores.
    Abrazo grande

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    1. Hola, Ebanista: Pues te recibimos con mucho gusto. Saludos y gracias por tu cálido comentario.

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  3. Gracias por compartir este blog.

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    1. Hola, Blanca: Muchas gracias a ti por el comentario. Saludos.

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  4. Hola, me gustaría saber si el compás se binario o ternario.

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    1. Hola: Binario, desde luego. Gracias por tu inquietud.

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  5. ¿De capa caída los Sanfermines...? Eso es más un deseo que una realidad. En mi opinión sobra ese comentario.

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  6. Muy interesante el post. Me encanta su obra Zapateado.

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