Aunque en nuestros días pueda parecer raro, Clara Schumann fue de los pocos pianistas de su tiempo que se presentaba en público tocando de memoria. Nacida en Leipzig en 1819, hizo su debut formal a los once años, en la célebre sala Gewandhaus, y a los dieciocho ya había hecho giras por Alemania, Francia y Austria. A la muerte de su marido Robert, debió asumir el papel de proveedor de la familia y se convirtió así en una de las escasísimas mujeres –sino la única– que pudo desarrollar a mediados del siglo XIX una carrera internacional exitosa como concertista en piano.
Clara era hija de Friedrich Wieck, un talentoso profesor de piano de Leipzig a cuya casa llegó el futuro compositor Robert Schumann a alojarse, como era la costumbre, para atender así, diariamente, clases con el maestro. Clara tenía once años, Robert veinte. Diez años después contraerán matrimonio, luego de superar los innumerables escollos dispuestos por Friedrich. Y comoquiera que Robert, a consecuencia de una lesión autoinferida en un dedo de la mano derecha canceló para siempre su carrera como intérprete, debió ser Clara quien tomara en sus manos la tarea de dar a conocer en Europa la obra de su marido, junto a la propia, además de la de Bach, Doménico Scarlatti, Beethoven, Schubert y, naturalmente, Johannes Brahms.
Seis de los ocho hijos de Clara y Robert Schumann |
Con la muerte de Robert en 1856, la pianista compositora quedó viuda a los 37 años. Retomó sus giras, las que había suspendido a raíz de la penosa y larga enfermedad mental de su marido, reconquistando a su audiencia y convirtiéndose en la concertista más brillante del siglo XIX. Pero dejó de componer. Su norte fue desde entonces la divulgación de la obra del esposo, centrándose en la publicación y reedición de su música. La última presentación en público de Clara se dio en 1891, si bien continuó dando clases en el Conservatorio Hoch, de Frankfurt, hasta su muerte, el 20 de mayo de 1896.
La imagen fija del "video" es un dibujo de Clara, a los 21 años.
La obra de Clara Schumann no la conocemos en su totalidad. Sabemos que contiene piezas para piano solo, canciones para voz y piano, música de cámara, de orquesta y música coral. La pieza que escuchamos, compuesta por una Clara quinceañera, lleva el número 2 de su opus 6, un conjunto de piezas cortas titulado Soirees Musicales. La versión es del pianista danés Bart von Oort.
En general, la producción de Clara permaneció prácticamente desconocida durante su vida, aunque después de 1870 surgió algún interés en editarla. Recién en la segunda mitad del siglo veinte se publicó parte de su obra, pero mucho de ella no es de conocimiento público todavía porque pertenece a colecciones privadas. Inexplicablemente, también, la Enciclopedia Británica, edición 1984, no contiene en la macropedia una entrada exclusiva para Clara.
.........................................................................................................................................
Amigo
visitante:
Si te gustó el artículo, mucho te agradecemos si lo compartes, con un cómodo clic
Bien por las mujeres!!!!
ResponderEliminarBieen, Jaimito. Gracias por ver, escuchar, comentar y, ojalá, difundir.
EliminarLa música es preciosa. Necesita más reconocimiento!
Eliminar...el ruido de una aspiradora compite con las notas del piano... ¿que debo hacer maestro... acaso asesinar a quien maneja el aparato doméstico, acaso cometer suicidio, o, talvez dejar que se extinga el sonido del piano?...
ResponderEliminarDejar los estudios, inmediatamente.
EliminarYo no se como le quedaba tiempo a esta señora para tocar el piano si tenía que atender a tanto cabro chico. De seguro que tenía varias nanas que lo hacían por ella. Si esta rocachonas no lo pasaban nada de mal...
ResponderEliminar¿Sabías Dago que la Juani Subercauseaux es descendiente directa de Clara Schumann? Me encontré con ella recien en Hush Puppies. Ella, según cuenta, jugaba cuando chica con la Reina Isabel. La Juani era Directora del Depto. de Música de la Católica, nos hizo clases de viola de gamba cuando chicas pero no queríamos cortarnos las uñas asi que la cosa no prendió. Ahora vive en un cerro de Cuyuncaví bajo. Lindo nocturno pero no es Schumann y como que no logra un clímax que conmueva como Schumann. No es que sea antifeminista. CPía
ResponderEliminarQué simpática tu Juani...
EliminarNo, pos, no es Robert... pero la Clarita tenía como catorce años cuando lo compuso.
Gracias por tu comentario.
que gran historia, que linda su música ...tremenda mujer!
ResponderEliminarAsí es. La Clarita era tremenda mujer, si no, pregúntale a Johannes Brahms. Gracias por tu comentario. (Haz click donde está su nombre, aquí en el post).
ResponderEliminarBonita historia de esta casi desconocida pianista.
ResponderEliminarAsi es. Lamentable. Una tremenda artista. Saludos y gracias x tu comentario.
Eliminar