lunes, 5 de octubre de 2020

Liszt: Rapsodia Húngara No 8


Mientras estuvo en Hungría, Franz Liszt transcribió numerosas melodías escuchadas a bandas gitanas autóctonas. Usando estas "antiguas" melodías en sus futuras rapsodias húngaras, el maestro creyó estar inmortalizando el alma del pueblo húngaro. La verdad es que muchos de esos trozos habían sido escritos por compositores contemporáneos, o inmediatamente anteriores, alcanzando popularidad en los sectores rurales. Claro que esto no le importó gran cosa al maestro. Con que las damas siguieran desmayándose en sus recitales, y se agarraran de las mechas por su pañuelo, estaba todo bien.


Las rapsodias húngaras de Liszt derivan de un estilo y danza del siglo XVIII llamada verbunkos, utilizada en Hungría durante el reclutamiento de tropas, para entusiasmar a los campesinos con la maravillosa vida de los ejércitos. (para entusiasmar, imaginamos).
Cuenta con al menos dos secciones contrastantes: una lenta, o lassan, y una rápida, o friska.
En toda su vida, el maestro compuso 19 rapsodias, cuya tarea abordó en dos etapas, entre 1846-53 y 1882-85.

Rapsodia Húngara No 8, en Fa sostenido menor
Ya dijimos que el maestro húngaro no necesariamente usó melodías genuinamente folklóricas en sus rapsodias húngaras. Pero en el caso de la No 8 hizo uso efectivamente de una melodía del folklore húngaro llamada Kaka toven kolt a ruca (cuya traducción no logré encontrar) en conjunto con una melodía del violinista y compositor húngaro Márk Rózsavölgyi (1789 - 1848).  
Ahora bien, lo que es genuinamente húngaro en estas obras es el molde "folklórico" que Liszt supo imprimir a la música. El sabor gitano abunda en todas ellas así como muchos otros estilos étnicos propios de Hungría. 

Rapsodia "Capriccio"
A raíz del inicio de la No 8, marcado Lento e capriccio, la pieza ha terminado siendo conocida también como "Capriccio". Se inicia con una corta y dramática introducción. A continuación, viene el tema principal, lento y melancólico, muy ornamentado (lassan). El segundo tema aparece más o menos a la mitad de la pieza, más brillante, evocando imágenes de una celebración campesina (friska). El ambiente festivo se vuelve muy alegre y retozón al final, cuando la pirotecnia pianística alcanza su clímax.
La pieza dura entre seis y siete minutos.

La versión es del pianista ruso Vasily Salnikov.


2 comentarios :

  1. Una vez más, muchas gracias por enseñarnos tan bella música, así como las orientaciones para disfrutar aún más de ella.

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    1. Hola, Oyente Libre...: Gracias por tu atento comentario. Saludos.

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