jueves, 19 de marzo de 2015

Mahler: Sinfonía No 1 - Marcha fúnebre



A mediados de la década de 1880, el prestigio de Gustav Mahler como director iba en franco aumento, y como compositor podía mostrar un trabajo temprano, considerado su primera obra maestra, una cantata, terminada a los veinte años. De modo que podía presentarse al mundo como un compositor de genio que por el momento se ganaba la vida como director de variadas agrupaciones orquestales de gran parte de Europa. A la par, su extrema severidad, rectitud y capacidad de trabajo comenzaban a hacerse célebres, así como las habituales sesiones de ensayos interminables.

Leipzig
Luego de cumplir dos exitosas temporadas como director del Teatro Alemán de Praga entre 1884 y 1886, Mahler consideró que la ciudad le había quedado chica y que ya era hora de buscar nuevos caminos. Su próximo destino fue Leipzig, donde un golpe de "suerte" la repentina enfermedad del anciano director titular– lo colocó en una posición privilegiada. Las representaciones de El anillo del nibelungo de Wagner, bajo su batuta, consiguieron un éxito colosal. A partir de entonces, su reputación en Leipzig quedó asegurada.

Gustav Mahler (1860 - 1911)
Marion
Al poco tiempo, trabó conocimiento con un nieto de Carl Maria von Weber, personaje que logró interesar a Mahler para trabajar en los bocetos de una ópera cómica que su abuelo había dejado inacabados. La tarea era enorme, de modo que las sesiones de trabajo se multiplicaron, buen número de ellas en casa del nieto, quien tenía por esposa a una bella mujer, de nombre Marion. El joven Gustav, de 27 años, no tardó en quedar prendado de ella.

Es extendida la opinión de que la relación no fue correspondida, pero algunos testimonios aseguran que Marion también cayó bajo el hechizo del aclamado director. Al final del día primó la sensatez y según cuenta Alma Mahler en sus memorias, para Gustav "fue un alivio que el tren partiera sin que apareciera la mujer que iba a huir en su compañía". Con todo, el affaire tuvo una virtud: Mahler volvió a la composición y fruto de ello fue su Primera Sinfonía.

Sinfonía N° 1 en re mayor ("Titán") - Tercer movimiento: Marcha fúnebre
Curiosamente, la obra sigue siendo nombrada "Titán" en los programas de conciertos pese a que muy tempranamente el mismo Mahler desechó su primitivo título. Compuesta de cuatro movimientos, fue terminada en 1888 y estrenada en Budapest al año siguiente.
Su tercer movimiento, profundamente irónico al decir de los entendidos, contiene una marcha fúnebre basada en la canción popular infantil Frére Jacques, que Mahler trabajó en tonalidad menor encargando su presentación a un contrabajo solo. El trío central (minuto 2:36), por su parte, evoca música de cabaret, ligeramente cursi, de la Viena de la época.

La versión es de la Orquesta Juvenil Universitaria Eduardo Mata de la UNAM.


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3 comentarios :

  1. Esta sinfonía siempre me ha parecido dentro de todo la más accesible de Mahler, el primer movimiento empieza tan suave y va creciendo hasta esa explosión de la orquesta, el segundo movimiento que es una especie de vals deformado o al menos así me suena a mi y el tercer movimiento esa canción judía o marcha fúnebre.

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  2. Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.

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  3. Exactamente, Daniel: Muy acertado comentario. Gracias.

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