Justo después de su cumpleaños número 28, Wolfgang Amadeus Mozart decidió comenzar a comportarse como un músico organizado. Por aquella época, ya había compuesto aproximadamente 450 piezas, una obra impresionante a la que, suponemos, no era fácil seguir el rastro. Así que en febrero de 1784 adquirió en el comercio de Viena un cuaderno de 44 páginas, puso una inscripción en la cubierta: "Catálogo de Todas mis Obras", y comenzó a registrar una a una las nuevas composiciones. En la página izquierda anotaba el título o alguna descripción de la pieza, más la fecha de término y la orquestación. En la página derecha garrapateaba los primeros compases, a manera de "ayuda memoria".
Cuando Mozart se estableció en Viena en 1781, lo hizo pensando en desenvolverse allí como pianista y compositor. El modo más obvio de desempeñar los dos oficios descansaba en la composición de conciertos para piano, oficio, demás está decirlo, que Wolfgang Amadeus manejaba a la perfección. Ya había dado muestras de ello en los seis conciertos compuestos hasta el momento, además de los dos compuestos para dos y tres pianos, y sin mencionar aquellos arreglos para piano y orquesta de movimientos de otros compositores. Pero al instalarse en Viena, y comprometerse en matrimonio poco después, el número de conciertos escritos debió elevarse sostenidamente. Había que mantener una familia.
Doce conciertos en cuatro años
Así, en la temporada 1782-83 compuso tres conciertos. En 1784 compuso seis, el punto más alto en su etapa vienesa. De allí sacó fuerzas para escribir otros tres en la temporada 1785-86. Pero ahí se acabó la buena racha, y en 1787 no compuso ninguno. Escribió uno en 1788; ninguno en 1789-90; y un último el año de su muerte. Estas sencillas estadísticas no cuentan la historia completa del "Mozart pianista" pues se presentó muchas veces como pianista en premieres que no contaban con conciertos de estreno; sin embargo, el pequeño recuento nos habla de su trayectoria como pianista durante los años vieneses.
Concierto No 23 en La Mayor
Gracias a la notable idea del Catálogo, sabemos que el Concierto No 23 (K. 488) fue terminado el 2 de marzo de 1786. Sin embargo, también sabemos que la obra fue iniciada en 1784, cuando Mozart vivía su mejor momento como pianista en la capital de los Habsburgo. En algún momento Mozart debió dejar el trabajo de lado (quizá ocupado por la composición de Le Nozze di Figaro), y solo lo terminó a fines del invierno de 1786, cuando fue incorporado al catálogo con la fecha ya anotada. Muy probablemente, fue estrenado algunos días más tarde en Viena, con Mozart al piano, desde luego.
Está compuesto de tres movimientos. La cadenza del primero de ellos pertenece a Mozart. La dejó escrita, algo inusual en él.
00:00 Allegro / Alegre y vivaz, con uno que otro toque melancólico.
11:17 Adagio / Apasionadamente bello. Su delicioso tema fue "pedido en préstamo" por una publicidad de Air France, hace algunos años.
18:31 Allegro assai / Un rondó exuberante.
La versión es de Maurizio Pollini acompañado de la Filarmónica de Viena dirigida por Karl Bohm.
Amigo visitante:
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Muy bueno el artículo. Esas páginas autógrafas deben estar bien interesantes. En este momento estoy terminando de leer la sonata para piano 5 y es muy divertida tocarla.
ResponderEliminarSaludos
Bruno
Hola, Bruno: Gracias. El catálogo, hasta donde entiendo, está en Internet, aunque no recuerdo exactamente dónde. Y te felicito por la sonata, no la ubico por ese número, pero... tratándose de Mozart... Que te vaya súper bien con ella. Saludos, y gracias por el comentario.
EliminarSonata n°5 o K283
ResponderEliminarSaludos
Ok. Gracias. Creo que no la conozco. Yo las tomé a partir de la K 330. Interesante. La escucharé y veré si puedo escribir algo sobre ella, o, sobre "en qué andaba Mozart". Gracias. Saludos.
EliminarMaravilloso concierto,el segundo movimiento es de una belleza celestial. Yo he escuchado innumerables versiones: Brendel,Perahia,Uchida,etc y creo que la de Pollini debe estar entre las mejores junto a la de Casadesus y Serkin. En fin.. muy buenos pianista para escuchar y disfrutar.. Saludos
ResponderEliminarMaravilloso concierto,el segundo movimiento es de una belleza celestial. Yo he escuchado innumerables versiones: Brendel,Perahia,Uchida,etc y creo que la de Pollini debe estar entre las mejores junto a la de Casadesus y Serkin. En fin.. muy buenos pianista para escuchar y disfrutar.. Saludos
ResponderEliminarHola, Sergio. Gracias por tu comentario. Saludos.
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